El Royal Mail, servicio postal del Reino Unido, anunció este martes la suspensión temporal de envíos de paquetes hacia Estados Unidos, tras la confusión generada por la entrada en vigor de los nuevos impuestos de importación a finales de agosto. La medida responde a la orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump, que elimina la exención global para paquetes de bajo valor.
La compañía detalló que retirará sus servicios de exportación para empresas a partir de mañana, aunque confía en implementar un nuevo sistema que cumpla con las disposiciones estadounidenses. Royal Mail precisó que las cartas y tarjetas podrán seguir enviándose sin restricciones, por lo que la suspensión afectará únicamente a los paquetes.
Washington justificó la eliminación de la exención al señalar que buscaba frenar la “práctica engañosa” de algunos transportistas que habrían abusado de este beneficio para introducir drogas ilícitas al país. Mientras tanto, compañías británicas expresaron preocupación por los efectos que la medida pueda tener en el comercio internacional y en las pequeñas y medianas empresas que dependen de la paquetería hacia Estados Unidos.
