
El FC Barcelona enfrenta una situación financiera crítica al acumular una deuda total que asciende a 2,500 millones de euros, de acuerdo con reportes recientes vinculados a la auditoría económica del club y medios deportivos españoles. La cifra refleja el impacto del gasto elevado en fichajes, salarios, intereses financieros y compromisos pendientes adquiridos en años anteriores.
De ese monto, aproximadamente 1,000 millones de euros corresponden a deuda a corto plazo, mientras que el resto se mantiene como obligaciones financieras a mediano y largo plazo. Además, el club aún afronta pagos relacionados con el proyecto del Spotify Camp Nou y otras inversiones estructurales.
La actual directiva, encabezada por Joan Laporta, ha implementado medidas como la activación de “palancas económicas”, venta de activos comerciales y reducción salarial de jugadores para intentar estabilizar las cuentas. Sin embargo, los compromisos financieros continúan condicionando la capacidad de maniobra del club tanto en fichajes como en la inscripción de jugadores bajo las reglas del Fair Play financiero de LaLiga.
Analistas indican que el Barcelona necesita aumentar ingresos sostenibles particularmente por patrocinios y competiciones europeas para evitar mayores tensiones económicas en los próximos años. Hasta el momento, la institución no ha emitido un nuevo comunicado oficial sobre el estado actualizado de su deuda.