El FC Barcelona y Ansu Fati están cerca de cerrar un acuerdo que llevaría al joven delantero español al AS Mónaco en calidad de cedido, pero con una novedad clave: el club catalán contemplaría una renovación de su contrato antes de oficializar la salida, como parte de una estrategia para mantener el control sobre su futuro.

Aunque Fati tiene contrato vigente hasta junio de 2027, la directiva blaugrana valora extender su vínculo para asegurarse una cláusula de recompra y conservar un porcentaje en caso de venta futura. La operación con el conjunto monegasco se negocia bajo la figura de una cesión por un año, con opción de compra cercana a los 15 millones de euros.

De concretarse el acuerdo, el Mónaco asumiría gran parte del salario del jugador, mientras que el Barcelona se reservaría condiciones que permitirían recuperar al atacante en caso de que retome su mejor nivel. La decisión de Fati responde al deseo de contar con minutos y regularidad, elementos que el técnico del Mónaco, Adi Hütter, le ha prometido.

El club catalán y el entorno del jugador trabajan para cerrar todos los detalles antes del 30 de junio, fecha clave en términos fiscales y de planificación deportiva. Esta operación marcaría un nuevo capítulo para Fati, que busca relanzar su carrera tras un paso irregular por el Brighton y una temporada sin protagonismo en el Camp Nou.