El exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas (2013-2018), actualmente alojado en la embajada de México en Quito como huésped, tiene previsto solicitar asilo político a México, según confirmó su abogado, Eduardo Franco Loor. Glas argumenta ser un perseguido político y víctima de una «arremetida ilegal, arbitraria e inconstitucional» por parte de la fiscalía ecuatoriana.
Glas ingresó a la embajada mexicana durante el pasado fin de semana, justo cuando la fiscalía solicitaba su comparecencia en relación con el caso «Reconstrucción». La Cancillería de México, el 17 de diciembre, confirmó su estatus de huésped y expresó disposición para analizar su solicitud de asilo político.
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México detalló que Glas manifestó temor por su seguridad y libertad personal, y se le permitió el acceso conforme a los protocolos y principios constitucionales mexicanos. La Cancillería mexicana aseguró que, en caso de formalizar la solicitud de asilo político, se analizará cuidadosamente con base en tratados internacionales y el derecho internacional consuetudinario.
Por su parte, el gobierno de Ecuador solicitó a la embajada mexicana en Ecuador que instara a Glas a abandonar la delegación diplomática para que pueda ser detenido en cumplimiento de una investigación fiscal. La Cancillería ecuatoriana comunicó esta solicitud a México, buscando colaboración en la situación de Jorge Glas.
