
Agencias de viajes y hoteleros han expresado su inconformidad y amenazan con cancelar operaciones hacia el recién inaugurado aeropuerto de Tulum, acusando al consorcio militar que lo opera de pretender cobrar derechos de 805 pesos más impuestos por cada ocasión en que recojan pasajeros en la terminal. Roberto Rubio, presidente de la Asociación Mexicana de Transportadoras Turísticas de Quintana Roo, calificó este cobro como ilegal y señaló que afectará a los turistas.
La manifestación, encabezada por Rubio, contó con la participación de cerca de 40 empresarios y 30 camionetas de transporte turístico. El aeropuerto, ubicado a más de 20 kilómetros de Muyil en la selva maya, generó controversia por su ubicación y el nuevo cargo que se pretende imponer a las agencias y transportistas que operan en la terminal.